Por mucho que me desprecies, que me hagas daño, que me insultes, que me odies... Siempre estaré ahí porque se que algún día me necesitaras y esa será mi recompensa... Poder volver a estar contigo, hablarte sin tener que preocuparme por nada ni nadie... Solo tendré que esperar para que las cosas sigan su camino... 

Pasando mis labios tiernamente sobre tu piel, recorriendo dulcemente tu calor, sintiendo poco a poco la fuerza salvaje de tu pasión, enamorados de nuestra pasión… Te quiero… Te deseo…

Llora, ¡Grita con todas tus fuerzas! Puede que te sirva de algo... Puede que en este silencio tan desesperante encuentres alguna posibilidad lejana, alguna solución a tus problemas... quizás desagobio... quizás tranquilidad... No pienses en que siempre todo va a ir mal porque después de cada noche, por muy oscura y fría que sea siempre llega el amanecer con sus cosas bonitas. Piensa... aunque la noche sea oscura siempre puedes mirar hacia arriba y ver las estrellas, ellas tienen luz.... por muy fría que sea siempre va a estar alguien ahí para darte el calor que te haga falta. No te das cuenta de estas cosas y cuando realmente lo aces puede ser tarde... Claro… tarde para las cosas que tenias y puede que no vuelvas a tener pero no para las que te esperan a la siguiente esquina de tu camino... Lucha cuanto puedas por lo que crees querer porque puede que todavía estés a tiempo de recuperar algo... ¡Aunque sea lo mas mínimo! Toma tus propias decisiones y no dejes que te roben ninguna esperanza porque si algo debe ser tuyo lo acabara siendo tarde o temprano...